Amor y belleza
Una obra sorprendente con una visión original, una búsqueda incesante de la excelencia olfativa para crear sueños que se transforman en recuerdos. Todo surge de una historia de amor eterno. Un homenaje al Renacimiento italiano y a uno de sus grandes intérpretes: Raffaello Sanzio. La historia de un amor profundo e impactante, el que experimentaron Raffaello y su Margarita, contra toda norma y prejuicio. Un amor puro que nos muestra cómo este sentimiento puede generar energía creativa y dejar huellas imborrables en la historia de la humanidad.
Rafael y Margarita
Rafael era un joven que vivía en las colinas de Urbino, cultivando su alma artística en el taller de su padre. Fue llamado a Roma por el Papa para pintar sus aposentos, por lo que se encontró frecuentando la más alta aristocracia de la época. Prometido con la sobrina del cardenal Medici, Rafael se enamoró perdidamente de Margarita, hija del panadero de Trastévere. Un amor prohibido, dada la diferencia de riqueza entre ambos, consumado en secreto en el jardín trasero de la panadería de su padre. El suyo era un amor tan apasionado que, tras una noche con Margarita, Rafael comenzó a sentir el malestar que poco después lo llevó a la muerte.
Rafael, único entre todos los artistas, fue enterrado en el Panteón. Parece que lo pidió, charlando con sus amigos artistas en la plaza frente al templo romano una tarde de verano. Margherita, joven y muy enamorada, decidió declararle su amor eterno al artista y vivir su vida en un recuerdo infinito de él. Solo los perfumes, mejor que las palabras, podrán contar esta historia de amor eterno, evocando recuerdos y emociones intensas. Y, al describir a los personajes, nos dirán algo sobre nosotros mismos.